El verano es esa estación que invita a vivir con ligereza, a disfrutar cada instante como si el tiempo se detuviera entre la brisa, el sol y los sabores frescos que marcan la temporada. Y en ese escenario perfecto, un buen vino no puede faltar.
Ya sea en un picnic, una tarde en la alberca o una cena bajo las estrellas, cada momento del verano tiene su propio ritmo, y con él, el vino ideal para acompañarlo. En Cepas Antiguas hemos seleccionado cinco etiquetas excepcionales que capturan la esencia del verano y elevan cada experiencia.
1. Picnic entre árboles: Submission Rosé
No hay plan más relajado que extender una manta bajo la sombra de un árbol, rodearse de amigos, frutas frescas, quesos suaves y algo de música suave. Para estos días de campo, Submission Rosé es la elección perfecta: un vino fresco, con notas de fresa, durazno y pétalos de rosa. Su perfil afrutado y equilibrado lo convierte en el acompañante ideal para embutidos, ensaladas con frutos rojos y tardes que se alargan con sonrisas.
2. Cena de mariscos bajo las estrellas: Verdejo Marqués de Griñón
Cuando cae la noche y el calor da tregua, una cena ligera de mariscos y pescados al grill pide un vino blanco con carácter. El Verdejo de Marqués de Griñón es una expresión vibrante de esta variedad española: aromas cítricos, toques herbales y una mineralidad que limpia el paladar y lo refresca. Ideal para acompañar ostras, ceviches, camarones o una paella marinera bajo la luna.
3. Tarde en la alberca con buena música: Lucky Draw
Verano también es sinónimo de espontaneidad. Para esos momentos junto a la alberca, donde la playlist sube el ánimo y el ambiente se llena de risas, recomendamos Lucky Draw. Es un vino descomplicado, vibrante, con notas tropicales y un final jugoso. Su versatilidad lo hace ideal para acompañar botanas, tacos de pescado, sushi o incluso unas brochetas al carbón.
4. Brunch con amigas: Chardonnay Evenstad Reserve – Domaine Serene
Un brunch veraniego puede incluir desde tartas de vegetales, ensaladas con burrata, quiches o toques cítricos y especiados. Para ello, nada como la elegancia del Chardonnay Evenstad Reserve de Domaine Serene. Proveniente de Oregon, este vino combina frescura con profundidad, con notas de manzana verde, limón confitado y una sutil presencia de roble. Sofisticado pero accesible, es el complemento perfecto para una mañana larga y deliciosa.
5. Charcutería ligera en la terraza: Motto
Para esas tardes donde la conversación fluye y el sol se despide en tonos dorados, una tabla de quesos, frutos secos y pan artesanal siempre es buena idea. Motto, un blanco de expresión moderna, equilibra la suavidad con una acidez agradable. Fresco, fácil de beber y con cuerpo suficiente para acompañar quesos cremosos, hummus o incluso una pizza blanca.
Cada plan tiene su energía, y cada vino una personalidad que puede elevar el momento. Desde lo afrutado y desenfadado hasta lo estructurado y elegante, los vinos de Cepas Antiguas te acompañan en esta temporada con opciones que combinan calidad, carácter y frescura.
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Porque cada sorbo puede ser un recuerdo. Y el mejor maridaje, empieza con una gran elección.
